domingo, 31 de marzo de 2013

Aprender a Amar desde el Alma con el Cuerpo

Somos diez mujeres. Diez mujeres que se reúnen una vez al mes. Que nos damos el permiso para que brote nuestro potencial transformador. Estamos comprometidas con nuestro viaje interior y nuestra sexualidad. De ese viaje extraemos mucho: dolor, felicidad, comprensiones profundas... Nos exploramos abiertamente y nos dejamos la piel en cada sesión. Cada una a su manera y a su ritmo, pero en ese compartir, nos enriquecemos mutuamente. Nos gusta Ser, y queremos disfrutar aún más de/con nuestro cuerpo. También sabemos que podemos amar(nos) de una manera más profunda y sagrada. Nos arropamos mutuamente y nos concedemos silencios. Y además nos divertimos.



Es fascinante comprobar cuánto podemos llegar a abrir el corazón a los demás y conseguir precisamente eso, lo que este viaje trans-formativo pretende: conectar con el alma y expresar a través del cuerpo. Altamente recomendable. El programa completo del viaje, guiado por Nicole Prado, se puede ver aquí.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Sobre masturbaciones I

El Inicio

Me ha costado decidirme a escribir esto. Y ahora lo digo sin pudor; me leen personas a las que en directo no les contaría ni media coma de esto tan mío de una forma tan explícita, porque sé que no se sentirían cómodas. Está claro que todo llega en el momento adecuado, y es éste un tema que me gusta especialmente, y no sólo por lo que a su práctica se refiere, sino por el interés que tiene a nivel científico-intelectual, y sobre todo por su importancia en relación a lo emocional, tanto en el fondo como en la superficie, aspectos que quisiera ir desarrollando en sucesivas entradas.

Ir al trasfondo de la masturbación, a lo que hay más allá de las sensaciones corporales, siempre ha sido objeto de mi curiosidad y de mis cuestiones más profundas. Pensé que escribir algo serio sobre el tema era tan fácil como documentarme a nivel empírico-científico, pero me pareció tan despersonalizado que me he decidido a construir una especie de biografía masturbatoria, si se me permite la expresión.


El caso es que yo, como una gran mayoría de mujeres, no fui acompañada/educada para tomar este asunto (ni cualquiera de naturaleza sexual) de manera natural. Más bien lo que circulaba en el entorno y el inconsciente colectivo era que esto no se hacía, sin más. Parecía que si no se hablaba de ello, no existía. Me pregunto cuándo dejaremos de ensombrecernos con tabúes y creencias absurdas. Va en nuestra naturaleza. Tenemos un cuerpo que siente, y en muchas ocasiones no somos capaces de disfrutar del todo de él (sí, todo el mundo tiene actividad sexual, pero no todo el mundo está exento de prejuicios de un tipo u otro). 

Así, fui creciendo y ya de niña mi cuerpo me enviaba señales que indicaban que aquello daba gustito. Mi madre me ha contado alguna vez que de bien pequeña, cuando en la televisión había alguna escena romántica (algún beso, no más), inocentemente le decía: "me sube una cosita por aquí abajo". Tierno, ¿no? Tengo que decir que bravo por la actitud de mi madre,  ya que no hubo ninguna represión manifiesta acerca del tema en esos momentos. Más adelante, recuerdo escenas de juego con algunas de mis primas, en las que sentíamos cosas que no sabíamos nombrar, pero había caricias y sensaciones placenteras y que de ningún modo considerábamos pecaminosas. ¡Era la naturaleza instintiva la que funcionaba! Más adelante, la cosa fue evolucionando y cambiando....

Continuará...

lunes, 25 de marzo de 2013

Lo tengo dentro

Tengo un demonio dentro,
un demonio que me grita, 
un demonio que me daña.

Me busca, me encuentra y me sobresalta.
No avisa cuando llega.
Es un demonio que me cuestiona,
que me desgarra la piel
y me arranca el corazón.

Es un demonio que desvela mi otra cara,
que me deja sin fuerza,
que lucha por tomarme
y que a veces me controla.

...

Tengo un ángel dentro,
un ángel que me susurra,
un ángel que me sostiene.

Me acaricia, me consuela y me sonríe.
Viene en mi defensa.
Es un ángel que me acepta,
que me quiere sin condiciones
y me devuelve a la vida.

Es un ángel que me lleva a ESE lugar, 
que me hace confiar,
que me inyecta esperanza,
y que a veces me controla.

Tengo un demonio pero no soy ese demonio.
Tengo un ángel pero no soy ese ángel.




jueves, 21 de marzo de 2013

Hoy estoy así

Rescato este texto que encontré circulando por facebook, y que me gusta especialmente porque ilustra al detalle la introspección y la indagación.
Está calcado del blog http://poderiofemenino.blogspot.com.es/2013/01/estoy-pa-dentro.html. Gracias a la autora, que plasma esa nuestra esencia cíclica y polar, y que no es incompatible con la ley de Impermanencia.

Estoy pá dentro
Quizá porque es invierno
o quizá porque toca
o quizá porque me lo pide el cuerpo
o quizá porque si no me pierdo.

Pero ahora estoy pá dentro.
Conmigo misma, con mis cosas, con mis telarañas, con laberintos, mis oscuridades, mis luces, mis risas, mis llantos, mis amores y desamores, mis "yoes", mis "tues", mis luchas, mis triunfos, mis derrotas, mis aprendizajes, mis "aún no lo entiendo", mis "ya lo pensaré mañana", mis quejas, mis críticas, mis alabanzas, mis yo misma conmigo misma, con mis sin tí no puedo, con mis sin mi tampoco....

Y para todo eso necesito estar pá dentro.
Calentita, reposando, cociendo, escuchando, en silencio...mudando la piel, quitando capas, a gusto conmigo misma...cultivando mi jardín interno, conociendo cada flor, cada mala hierba, cada hoja, cada piedra....

(Principio Femenino)




lunes, 18 de marzo de 2013

¿Por qué el agua es transparente?


Hace pocos días Xavi y Carla, los educadores de El Saltamontes, nos contaron un buen puñado de cosas interesantes sobre nuestros pequeños que acuden cada día allí. Una de las más divertidas y sorprendentes fue la batería de preguntas que han podido ir anotando para compilar, algo que no debe ser sencillo, dado el arsenal de material con el que suben cada día al monte, y teniendo en cuenta que a veces hay viento, otras llueve, otras nieva, y la libreta no siempre está "a mano". 



Son cuestiones sencillamente maravillosas, preguntadas con un ingenio e inocencia que enternecen y que son dignos de admirar. Dejo algunas aquí:

¿Qué son las rapaces?

¿Qué come un escorpión?

¿Cómo se hace una oblea?

¿Cuál es la serpiente más venenosa?

¿Por qué el agua es transparente?

¿Cómo duermen los leones?

¿Por qué los aguacates tienen hueso?

¿Existe el tren flecha?

¿Existe el tren pato?

¿Cuál es la saga de Star Wars?

¿Existe el hombre flecha?

¿Para qué existe el corazón?

¿Cómo apareció el viento?

¿De dónde vienen los nombres de los días de la semana?


¡Sencillamente deliciosos!



sábado, 16 de marzo de 2013

Sentimiento e intuición

Hace ya algunos años sentía ese fervor pasional de cuando crees en algo hasta la médula. Por aquel entonces comenzaba mis andanzas en el autoconocimiento y la indagación personal, y al poco llegó la maternidad y entré de cabeza en eso que se llama "crianza consciente". Lo llamen como lo llamen, eso simplemente fue para mí la materialización de una intuición y un instinto con el que en algún momento conecté y que, visto en perspectiva, no vale mucho la pena intelectualizar... Pero aún así, una que es muy estudiosa, se enfrascó en mil lecturas, y a día de hoy mi biblioteca de "lo consciente" es una pequeña joya que me gusta custodiar. 

Por mis debates internos pasaron Laura Gutman, Alice Miller, Michel Odent, Jean Liedoff, Meredith Small, Claudio Naranjo, John Bowbly, entre otros, y cada vez sentía con más fuerza aquello que genuinamente me salía. Por aquel entonces, sentía la necesidad imperiosa de ir explicando todas las teorías que iba interiorizando, a todo el mundo, en un intento de demostrar que ni me gustaba que cuestionaran mi estilo de crianza, y sobre todo que no me sentía respetada por elegir la opción personal en la que creía y creo. 



Recuerdo el día que conocí a Laura Mascaró en una charla a la que asistí de oyente, y planteaba mis dudas acerca del homeschooling. Ella dijo algo así como que cuando tienes la necesidad de explicar todo, coincide que no tienes elaboradas todas las respuestas. Estoy totalmente de acuerdo con esa afirmación. Ahora siento que ya no llevo encima esa necesidad de justificar, demostrar, contar y explicar. Ahora sencillamente se que es bueno lo que hago, porque me funciona, porque me siento tranquila y porque es simplemente maravilloso. Pero por encima de todo, porque es mío, personal, porque así lo elegí. Y es cierto que cuando incorporamos o interiorizamos nuestros procesos, en el momento que los hacemos nuestros, es cuando ya tenemos las respuestas, pero nos permitimos soltar la necesidad de aprobación a través de la demostración de teorías y conocimientos.

Hoy estoy feliz de haber disfrutado de esas lecturas, y de haber aprendido tanto, y de hecho, sigo haciéndolo, pero ahora siento que la intuición y la sabiduría interior conforman el verdadero germen del conocimiento.

La alegría de ver y entender es el más perfecto don de la Naturaleza. Albert Einstein